"El hombre sólo se realiza si tiene un conocimiento de su vida inconsciente"- C. G. Jung

Para algunos el Ser Humano va a ser la gran aventura del siglo XXI. El Ser Humano que aún no existe. El Ser Humano Cósmico.

Existen en este momento seres humanos, normóticos, viviendo la vida en función de sus necesidades físicas, emocionales y mentales inconscientes. Sabemos que en muchos lugares del planeta, ni siquiera las necesidades básicas, consideradas por la Organización Mundial de Salud, higiene, nutrición, hábitat y silencio, forman parte del día a día. Estas son las situaciones extremas de supervivencia humana.

La mayoría de los normóticos, han tenido asegurada su supervivencia, pero viven la patología de la normalidad, que les encierra y condiciona con creencias, valores y hábitos sociales contra la naturaleza, contra su propio ser, su bienestar y desarrollo natural.

Existen en este momento seres humanos que creen y buscan la Realización Humana, la felicidad, que es la condición natural de Ser Humano. Esta búsqueda se inicia con el proceso de escucha de la dimensión esencial de Ser, de la llamada de la felicidad que hay en nosotros. Son los seres en camino de convertirse en Humanos. Los seres humanos que hacen un esfuerzo de atención física, emocional y mental para salir de la inconsciencia, para ser Consciencia.

Convertirse en ser humano es convertirse en otro en relación al grupo. Es asumir la dimensión de animal humano e integrar la dimensión creativa y única, que cada uno es, en el lenguaje Junguiano individualizarse y expresar su autenticidad única. Ser Humano es hacer el proceso de individuación de que habla la psicología profunda o convertirse en santo o "otro", si queremos utilizar el lenguaje de la tradición cristiana antigua, en que "otro", del latín ALTERU - el que se diferencia, es el que se ha realizado en todas sus dimensiones de Ser.

Las dimensiones de Ser son los componentes humanos: la física con el cuerpo denso y el cuerpo sutil; la psíquica con los cuerpos emocional y mental concreto, componentes mutables y efímeros. El tercer componente humano es en el pensamiento occidental, la noética y en el oriental los cuerpos causales y búdicos, cuerpos mental abstracto e intuición. Con este componente podemos acceder al Inmortal, Conciencia Universal, Espíritu, Luz, Dios, podemos nombrarla, si queremos, sabiendo que cualquier palabra es limitada para expresar esta Realidad, que trasciende los componentes humanos. Podemos, sin embargo, como humanos atestiguar, intuir y vivir esta Realidad, Fuente Creativa, que es también la Fuente de la Ética, la Fuente de los Verdaderos Valores.

El verdadero Ser Humano es el que Crea, Co-crea al unísono con el Universo.

Sí, co-crear con el Universo, pero cómo?

Armonizando los componentes humanos, para que la acción esté en sintonía con lo que pensamos, con lo que sentimos que es la expresión de nuestra naturaleza y sabiduría profundas, que el cuerpo físico manifiesta continuamente. Lo que hay que desarrollar es la escucha de nosotros mismos, también de los demás y de todo a nuestro alrededor.

De esta armonización nos habla ese conocimiento revelado que es el Yoga, - sánscrito Yoga - que significa unir, conectar en armonía los componentes humanos. Es también de esta armonización de lo que habla la tradición hebrea, en la que la palabra Shalom significa paz, y también "ser entero", entero con lo físico, lo emocional, lo mental y la intuición. También de esta armonización nos habla la Astrología Psicológica y Transpersonal, que cada uno de los horóscopos revela. El equilibrio entre los elementos, tierra, agua, aire, fuego y el espacio que los contiene, corresponden a funciones psíquicas, es una de las muchas informaciones que una carta astral proporciona.

Para desarrollar estos componentes humanos que forman el Ser Humano entero, es necesario utilizar en la Educación / Formación los cuatro pilares educativos, ya definidos por la UNESCO: aprender a conocer; aprender a hacer; aprender a convivir y aprender a ser.

No le faltan a la humanidad conocimientos antiguos con sus terapias perennes o modernas con métodos innovadores, para poder comprender y desarrollar el Ser Humano.

Lo Transcendente, lo Transpersonal existe, no necesita ser desarrollado, es cada uno de nosotros quien necesita desarrollarse y equilibrarse para acceder e integrar la transpersonalidad.

Construyendo una personalidad con sus componentes equilibrados, saliendo de las oscilaciones de la dualidad, encontrando el equilibrio en el tercer punto, más allá de dos opuestos, de que nos habla la ciencia esotérica, que es también el tercero incluso del pensamiento cuántico, el punto de síntesis. Estos terceros puntos encuentran la información y conocimiento en la dimensión mayor, la Inteligencia Activa y Creativa del Universo, a través del proceso intuitivo.

Lo que sí puede faltarle al ser humano es la conciencia de la posibilidad, la voluntad, el conocimiento, la persistencia, la paciencia y el amor, en síntesis, falta de visión, para decidir convertirse en Ser Humano.

Dejar de tener miedo de lo desconocido, salir de las creencias y opiniones predefinidas y reconocer, sin sentirse amenazado, otros puntos de vista. Reconocer la visión interdisciplinar, en que todas las áreas del conocimiento, la ciencia, el arte, la filosofía y las tradiciones de sabiduría, son fuentes de conocimiento y aprendizaje.

También falta reconocer el valor de la vida humana, que podremos entender con esta metáfora budista: La vida de cada ser humano en el planeta tierra tiene la misma probabilidad de existencia que la de una tortuga que sube a la superficie en el océano una vez cada cien años, y en una de esas ocasiones encuentra un aro por donde mete la cabeza.

Escrito en 2008 y revisado en 2018
Maria Margarida Barros